Somos personas conscientes de la necesidad de Cristo en nuestras vidas. Nos apasiona adorar a Dios. En cada reunión buscamos conectarnos al cumplimiento del propósito de Dios para nuestras vidas. Te invitamos a conocer más sobre nuestra iglesia. 
 EN ESTO CREEMOS
La Biblia es la fuente inagotable de luz, orientación, ánimo, esperanza y estímulo para nuestra vida cristiana.  De modo que esta declaración de verdades tiene el propósito de formar una base para la confraternidad entre nosotros (es decir, que todos hablemos una misma cosa, 1 Co. 1:10; Ef. 4:3).

Las Sagradas Escrituras, tanto el Antiguo como el Nuevo Testamento, son inspiradas por Dios y son la revelación de Dios al hombre, infalible y autoritativa regla de fe y conducta (2 Tim. 3:15-17; 1 Tes. 2:13; 2 P. 1:19-21).

El único Dios verdadero se ha revelado a Sí Mismo como el propio existente, eterno, Creador de cielo y tierra, y el Redentor de la raza humana.  Él se ha revelado, además, como incorporando los principios de parentesco y asociación como Padre, Hijo y Espíritu Santo (Dt. 6:4; Is. 43:10-11; Mt. 28:19; Lc. 3:22).  La Adorable Trinidad.


El Señor Jesucristo es el eterno Hijo de Dios.  Las Escrituras declaran:

• Su nacimiento virginal (Mt. 1:23; Lc. 1:25-31). 
• Su vida sin pecado (Heb. 7:26; 1 P. 2:22). 
• Sus Milagros (Hch. 2:22; 10:38). 
• Su obra de sustitución en la cruz (1 Cor. 15:3; 2 Cor. 5:21). 
• Su resurrección corporal de entre los muertos (Mt. 28:6; Lc. 24:39; 1 Cor. 15:4). 
• Su exaltación a la diestra de Dios (Hch. 1:10; 2:33; Fil. 2:9-11; Heb. 1:3). 
La única esperanza de redención que tiene el hombre es a través de la sangre vertida por Jesucristo, el Hijo de Dios en la cruz del Calvario.

El Espíritu Santo provee poder para la vida cristiana y el servicio a Dios.  Dios da a cada creyente alguna prueba de la presencia del Espíritu, a unos le concede dones espirituales los cuales capacitan para el ministerio (Lc. 24:49; Hch. 1:4-8; 1 Cor. 12:1-32).  Esta experiencia es distinta y posterior a la experiencia del nuevo nacimiento (Hch. 11:15-16; 15:7-9; 10:44-46).


VISIÓN
Proclamar el evangelio de Jesucristo mediante todos los medios y formas posibles. Discipular los creyentes para su crecimiento en Cristo. Desarrollar los dones y capacidades dados por el Espíritu Santo para la edificación de la iglesia.


MISIÓN
Proclamar el evangelio de Jesucristo mediante todos los medios y formas posibles. Discipular los creyentes para su crecimiento en Cristo. Desarrollar los dones y capacidades dados por el Espíritu Santo para la edificación de la iglesia.


CONÓCENOS

Nosotros nos constituimos en un cuerpo de creyentes cristianos, de acuerdo con el plan espiritual para la Iglesia: que promovemos el evangelio de Cristo aquí en la tierra, que adoramos a Dios como un cuerpo unido, que voluntariamente rendimos nuestras vidas a la soberanía de Cristo (Mat. 28: 19, 20) y a la dirección del Espíritu Santo de manera que nuestro ministerio sea caracterizado por la operación de los dones espirituales según 1 Cor. 12: 8-10.  

Nuestro propósito es resaltar fuertemente el valor de creer en Jesús y proclamar su divino evangelio por todo el mundo cumpliendo con la gran comisión de nuestro Señor que dice: "Id por todo el mundo y predicar el evangelio a toda criatura" Marcos 16:15; y de preparar a los creyentes para el pronto retorno del Señor. 

Reconocemos la Palabra de Dios como nuestra regla infalible de fe.